Elisabet Garriga: “El Yunus Social Business Center de Barcelona creará empresas sociales que resolverán problemas como el desempleo juvenil”
Con tan solo 27 dólares y 42 personas empezó una de las ideas más transformadoras y con mayor impacto social del último siglo: los microcréditos. El Premio Nobel de la Paz Muhammad Yunus, que por aquel entonces era profesor de la Universidad de Chittagong, prestó 856 takas –la moneda de Bangladesh–, unos 27 dólares, a 42 personas de la población rural de Jobra para poder escapar de las condiciones abusivas de los prestamistas locales. Al cabo del tiempo, todas ellas pudieron devolver los préstamos que les concedieron. Éstos fueron la semilla del primer banco de microcréditos, el Grammen Bank, conocido también como “el banco de los pobres”.
La peculiaridad del banco es que ofrecía préstamos sin aval, pequeñas cantidades, dirigidos principalmente a mujeres que tuvieran negocios o quisiesen lanzar su propio negocio. Eran microcréditos que generalmente se utilizaban para comprar utensilios, para comprar materia prima, maquinaria y/o para lanzar nuevos negocios que generasen beneficios sostenibles que mejoraran la calidad de vida de sus familias. Además, muchos de los negocios acababan generando nuevos puestos de trabajo para otras familias. “No buscamos empleo sino que proveemos empleo”, afirman los miembros afiliados a su banco.
Liderazgo transformador
Consciente de que ninguna teoría económica resolvía el problema de la hambruna y de la pobreza de Bangladesh, uno de los países más poblados del mundo, Muhammad Yunus decidió pasar a la acción e ideó un futuro mejor a través de la opción de los microcréditos. Tras su intento fallido de convencer a los bancos para que concedieran préstamos para impulsar nuevos negocios, optó por poner de su propio bolsillo 42 dólares para este fin. Lo que le motivó a dar este paso fue su firme creencia de que cualquier persona puede lanzar su propio negocio, que cada persona tiene la fuerza creativa para imaginar y crear un futuro mejor y que éste pasa por el emprendimiento personal.
Se trata, sin duda, de un gran ejemplo de liderazgo transformador que el profesor Yunus ha llevado a la práctica con la creación de más de ocho empresas sociales en India –de yogures, de agua, de telecomunicaciones, de paneles solares etc…–. Estas empresas nacieron con el objetivo de resolver los grandes problemas de Bangladesh: nutrición, agua, energía, conectividad.
La empresa social –o social business– es un tipo de negocio diferente que se basa en siete principios: las empresas deben tener como prioridad un objetivo social, poseer una sostenibilidad financiera y económica, no pagar dividendos una vez se recupera el capital, deben reinvertir los beneficios, tienen que contribuir a preservar el medio ambiente, deben ofrecer buenas condiciones salariales y realizarse con alegría. Estos siete principios de la empresa social implican otra manera de hacer negocios y muestran unos valores sociales y sostenibles que en EADA apoyamos desde nuestros inicios, y que fomentamos y difundimos a través de nuestro Corporate Sustainability Impact Centre.
Resolver el problema del desempleo en Barcelona
Pero el profesor Yunus ha ido más allá y ha hecho extensible su proyecto a más países, a través de la creación de Yunus Center, para crear más empresas sociales que resuelvan los problemas y necesidades sociales y medioambientales en estos países. El pasado 28 de julio en Dhaka se firmó la creación del Yunus Social Business Center de Barcelona, que estará cogestionado por EADA junto con siete universidades catalanas –UPF, UB, UPC, UAB, UOC, UIC y Abat Oliva–. En este centro, el problema social que tenemos que tratar y reducir es el elevado porcentaje de paro juvenil en Barcelona. El Yunus Social Business Center de Barcelona no sólo será un centro de reflexión e investigación sino de acción. Formación, talleres, laboratorio de ideas y una competición de planes de negocio serán algunas de las iniciativas que pondremos en marcha a partir del próximo mes 2016.
Tal como afirma Muhammad Yunus el éxito del Yunus Social Business Center Barcelona se medirá en función del número de puestos de trabajo creados entre los jóvenes desempleados en Barcelona. Esperamos que el centro sea una palanca de cambio para el problema del paro juvenil en Barcelona y que a través de la empresa social se muestre otra manera de hacer negocios y generar empresas que sostenibles de alto impacto social y económico.
Artículo escrito por la Dra. Elisabet Garriga, profesora de Política de Empresa y directora del EADA Corporate Sustainability Impact Centre.