De EADA a Boehringer Ingelheim
Estefanía Fernández es una de las participantes actuales del Master en Marketing Farmacéutico de EADA. Tras finalizar el grado en Biotecnología decidió profundizar en sus dos grandes pasiones, el marketing y el sector farma, a través de este programa. Fue una decisión acertada, pues enseguida se incorporó en el prestigioso laboratorio Boehringer Ingelheim como Marketing Operations Trainee. En la siguiente entrevista nos explica cómo ha sido este proceso así como sus impresiones en el master y sus retos de futuro.
¿Por qué decidiste hacer el Master en Marketing Farmacéutico de EADA?
Me interesé por el mundo del marketing a partir de un concurso universitario cuando estudiaba el grado en Biotecnología. A partir de ahí empecé a hacer prácticas en departamentos de marketing que tuvieran relación con el sector de salud y alimentación, desde pequeñas startups a multinacionales como Gallina Blanca. Tras esta experiencia decidí invertir en una formación específica en marketing farmacéutico. Así, justo cuando finalicé el grado inicié el master de EADA con el objetivo de trabajar en una multinacional farmacéutica y probar cómo era el marketing en productos de salud de prescripción. Gracias a ello me incorporé a finales de 2017 a Boehringer Ingelheim como Marketing Operations Trainee.
¿Qué estás aprendiendo en el master que puedas aplicar en tu trabajo?
El Master en Marketing Farmacéutico de EADA me aporta un aprendizaje técnico pero también más personal y de habilidades soft. Son de gran utilidad las sesiones de EADA Alumni & Careers, sobre todo, las relacionadas con neuromarketing, gestión de campañas digitales y workshops prácticos como los talleres sobre cómo preparar entrevistas por competencias o de negociación salarial. También me han ayudado mucho los asesores de EADA Careers, que te orientan y te mentorizan con el objetivo de conseguir aquello que deseas sabiendo poner el foco y el esfuerzo adecuado.
¿Cuál crees que será tu situación profesional al finalizar el master?
Me gustaría seguir avanzando en la línea de lo que hago actualmente en Boehringer Ingelheim. Me encantaría seguir formándome en temas de innovación e intraemprendimiento y aportar mi granito de arena en este sentido en la empresa donde esté. Tengo ganas de asumir responsabilidades y de aportar ese valor diferencial del que siempre de habla. Creo que lo que distingue una empresa de otra es la forma en la que se trabaja, los valores y su cultura. Por ello, me veo en una empresa donde su forma de trabajar y sus valores sean similares a los míos.
¿Cómo surgió la oportunidad del puesto actual en Boehringer Ingelheim?
Cuando me decidí a realizar el master me informé del periodo de prácticas y de sus condiciones. A partir de ahí empecé a hacer entrevistas en compañías que pudiesen interesarme. Una de ellas fue Boehringer, mi empresa actual: me encajó la posición con mis aspiraciones y percibí un buen ambiente de trabajo. Mi posición actual de Marketing Operations Trainee es muy dinámica y me permite tener una visión de 360º de todas las áreas terapéuticas, por lo que para un primer contacto con el marketing farmacéutico es genial. Me da una visión holística y está estrechamente relacionada con la transformación digital que está viviendo el sector salud actualmente.
¿Cuáles son las principales tareas que asumes diariamente?
Trabajo en el departamento de Marketing Operations, muy mano a mano con los customer managers de cada una de las áreas terapéuticas. Llevo a cabo actividades relacionadas con los clientes tales como organización de reuniones científicas, coordinación de la presencia de Boehringer en algunos congresos, además de dar seguimiento a actividades más internas que tenemos como compañía. Todos los días son diferentes, siempre hay nuevos proyectos y actividades donde aportar ideas nuevas. Es una posición muy ligada con la innovación y la búsqueda de nuevas maneras de hacer las cosas, lo cual me apasiona.
Para tener una carrera profesional exitosa es clave conocerse bien uno mismo y visualizar el futuro
¿Cuál crees que es la clave para tener una carrera exitosa?
Lo principal es conocerse bien uno mismo y visualizar el futuro. Se trata de saber poner ese foco o esa dirección hacia lo que nos hace cosquillas y nos motiva. A ello añadiría ser humildes, crear confianza en tu equipo, ser empáticos y trabajar diariamente la gestión emocional. Y, sobre todo, aprender de todo el mundo y asumir los “fracasos” sabiendo extraer lo positivo de ellos.
¿Por qué recomendarías hacer el máster en EADA?
El entorno actual tan cambiante y volátil te obliga a aprender constantemente. El mejor profesional es el que está actualizado en todo momento. Si nos centramos en un aprendizaje más reglado como es la realización de un master recomendaría EADA por la calidad de sus programas, tanto a nivel de contenido como profesorado y metodología. Valoro mucho el asesoramiento de EADA Alumni & Careers, pues te vincula para siempre con la escuela y es una herramienta de formación adicional y networking muy potente.
¿Cómo has vivido la evolución del sector farma en estos últimos años hasta el día de hoy?
La evolución del concepto valor en la industria farmacéutica ha ido cambiando, en los 80 y 90 el valor se encontraba en los blockbuster, moléculas químicas basadas en una gran fuerza de promoción donde el número de delegados era directamente proporcional a las vendas del producto. En el 2000 se inició la era de los biológicos, trayendo consigo los biosimilares de estos productos biológicos. Nuevos mecanismos de acción, productos de más complejidad y de precio más elevado. Actualmente se está evolucionando hacia el concepto value for money, es decir, que la innovación sea coste-efectiva, con estudios comparativos que debido a la crisis justifiquen la necesidad del gasto al Ministerio. Y paralelamente estamos también entrando hacia la medicina personalizada –biomarcadores, análisis genómicos…– y la autoregulación de Farmaindustria que ha permitido asentar un poco las reglas del juego.
Por tanto, hablaríamos de un entorno más competitivo, ¿no es así?
Exacto. Hay más competitividad de productos, lo que se traduce en tener acceso a un nicho de mercado más pequeño y un menor poder de negociación de precio con el Ministerio de Salud. Además, en estos últimos años han caído patentes de grandes productos, lo que implica que la comercialización de innovación sea difícil en según qué indicaciones, pues hay que demostrar al Ministerio una novedad muy superior a lo que ya está que justifique el pago de un precio de mercado superior que permita al laboratorio en cuestión recuperar la investigación.
¿Cuáles son los principales desafíos del marketing farmacéutico?
En mi opinión, el más importante es que es un sector que tiene clientes cada vez más diferenciados entre sí. Por un lado, los pacientes, cada vez más informados pero sin poder de decisión en aspectos de tratamiento y sin ser los pagadores. Por otro, los médicos, que son los prescriptores pero no consumidores del tratamiento y que en muchos casos están sujetos a un control de gasto farmacéutico, teniendo tope en las cuotas de medicamentos innovadores que pueden prescribir. También estaría el Ministerio, que es el pagador y tiene el deber de hacer un gasto sanitario lo más eficiente posible. Todo plan de marketing ha de focalizarse en las necesidades de los tres tipos de clientes y para ello se han de estudiar y caracterizar muy bien. Hay muchas iniciativas exitosas que tienen base en una buena colaboración entre estos diferentes stakeholders. Creo que es en esta dirección donde se ha de avanzar para obtener la máxima rentabilidad de los productos.
De EADA valoro la calidad de los programas, la metodología de aprendizaje y el asesoramiento de EADA Alumni & Careers
¿En qué ámbitos pueden innovar los farmacéuticos en beneficio del paciente?
La innovación en términos de paciente viene dada por tratamientos más individualizados, una medicina más ad hoc y focalizada. Además, los programas de adherencia al tratamiento cobran especial relevancia, promovidos en gran medida por acuerdos de riesgo compartidos entre el Ministerio y los laboratorios farmacéuticos. Lo que es ya una realidad es que el centro de las acciones son las personas, virando de un foco producto a un foco paciente. Los talleres de competencias soft que ofrecen los laboratorios a médicos también son innovaciones en beneficio del paciente, como talleres de comunicación médico paciente, los talleres de toma de decisiones compartidas… Estamos ante un entorno cambiante y todas las partes que conforman el sistema de salud han de adaptarse para funcionar de la mejor manera posible.
Dentro de este sector, ¿en qué área te gustaría especializarte?
La verdad es que no llevo mucho tiempo en el sector como para decir algo muy segura, pero la parte de marketing me está encantando. Para tener una visión transversal del sector me gustaría conocer varios departamentos. Me veo en el área de Marketing pero sin renunciar a otras posibles oportunidades que puedan surgir. De todo se aprende y todo suma.
¿Cómo te ves de aquí a 10 años?
Es una pregunta que siempre me cuesta responder…el entorno es tan cambiante y tengo la sensación que todo va tan rápido que veo difícil una previsión tan a futuro. Pero vamos a intentarlo… En 10 años, con 33 profesionalmente me veo con la misma ilusión y las mismas ganas, eso no quiero que cambie por nada del mundo. Pero imagino que habré viajado más que ahora y quizá habiendo hecho un stage en otro país, es algo que me gustaría plantearme en los próximos años. Ver otras culturas y otra forma de trabajar, conocer personas diferentes y abrirme a nuevos horizontes. Respecto al cargo me encantaría una posición donde pudiera liderar un equipo, haciendo grandes cosas juntos.