Storytelling: Las empresas seducen a través de relatos fascinantes

En el actual mundo globalizado, donde estamos expuestos a un exceso de información, cada vez es más difícil contar algo que sea interesante y que sorprenda. Por ello, la técnica del storytelling, que consiste en crear relatos que siguen la estructura de los cuentos, cobra cada vez más importancia a la hora de explicar cualquier hecho.

Esta metodología se está ya utilizando para lanzar nuevos productos, definir perfiles de candidatos en una campaña política, diseñar videojuegos –como extensión de las películas con las que comparte estructura conceptual-, difundir los dogmas de una religión o para plantear cualquier tipo de producto con el que seducir al consumidor, más allá de la simple convicción.

La técnica del storytelling  se utiliza para lanzar nuevos productos que seduzcan al consumidor, definir los perfiles de los candidatos políticos, diseñar videojuegos o incluso para propagar una religión

Así lo explicó Rafa Isún, director general de Travel Partners y profesor del International Master in Tourism & Hospitality Management, en el taller-conferencia Storytelling y el viaje de incentivo, donde explicó cómo una experiencia fascinante como son los viajes de incentivo se puede unir con la más pura tradición de los cuentos: “Se puede plantear un viaje a través de un relato o cuento por las inmensas posibilidades de destinos, lugares o anécdotas asociadas a la experiencia”.

MOTIVACIÓN, RECOMPENSA Y LEALTAD

La crisis actual ha comportado que muchas empresas opten por los viajes de incentivos basados en relatos apasionantes como elemento motivacional o compensatorio. Según Isún, “para premiar a los empleados –comerciales, básicamente– que han alcanzado un objetivo de ventas, ya sea en unidades o en cantidades, para premiar las mejores iniciativas también de los empleados, para recompensar a los mejores clientes de canal –por ejemplo, en concesionarios de automóviles, corredurías de seguros o grandes superficies– o para gratificar al cliente final –opción más frecuente entre marcas de gran consumo o editoriales–”.

Muchas empresas han recuperado los viajes de incentivos después de ver el efecto negativo que tuvo en su cuenta de resultados y en el consumo de sus productos la supresión de esta iniciativa

Rafa Isún explica que “en muchos casos, son empresas que habían suprimido los viajes de incentivos pero que, tras ver cómo esta decisión repercutió negativamente en su cuenta de resultados y en una reducción drástica de la tasa de consumo, no sólo sectorial o de producto, deciden recuperar esta iniciativa”. Y en todos estos casos, vinculando la planificación del viaje con la estructura del cuento, “para generar lealtad a una marca a través de un recuerdo imborrable”.